miércoles, 19 de mayo de 2010

VAYA SUBIDITA,.....



PUES HOY DESPUES DEDESCANAR DE LA PALIZA DEL LUNES , HA TOCADO SALIR CON LA LYNSKEY , EN PRIMCIPIO SOLO HERA SOLTAR PIERNAS PERO ME ENCOTRABA BIEN DE PATAS , DE PULSO Y COMO HABIA GANS DE PEDALEAR ME HE MARCADO UN PUERTACO, 17,6 KM SE SUBIDA CON ZONAS MUY TECNICASDE PIEDRAS SUELTA Y BASTANTE DESNIVEL, DONDE HA TOCADO METER PLATILLO,



COMO SUBE LA JODIA 29ER , ES INCREIBLE COMO SE ABDIERE EN ZONAS SUELTAS Y PASOS POR PIEDRAS Y REGUEROS , INCREIBLE ,




HOY HE PROBADO LAS BIELAS XTR PUESTAS Y UNA POTENCIA RITCHEY WCS CON ANGULACION DE 6º PUESTA EN NEGATIVA Y CREO QUE LA DEJARE, VOY UN PELIN MAS TUMBADO Y SUBO MAS COMODO, BAJANDO NO HE VISTO DIFERENCIA APRECIABLE COMO PARA NO OPTAR POR EL CAMBIO, TAMBEIN HE VARIADO LA LONGITUD DE LAS VAINAS CON LAS PUNTERAS PARAGON PARA DAR MAS PASO DE RUEDA , YA QUE ESTABA CASI ROZANDO CON LA PARTE TRASERA DEL DESVIADOR, AHORA HAY BASTANTE MARGEN PARA CUANDO BARRO, AHROA PARECE MAS COMODA AUN Y MAS APLOMO , INCREIBLE COMO CAMBIA EL COMPORTAMIENTO DE UNA BIKE CON CULAQUIER CAMBIO QUE SE LE HAGA

lunes, 17 de mayo de 2010

quien dijo que correr es de cobardes?? que no me entere yo...

esta mañana me paso por la tienda de bikes y veo los camelbak mule 2010, en color verde kawasaki, puff que bonito essssssssssssssssssss, pues nada me lo pillo. ya la vamos a liar esta tarde.

pues nada esta tarde tras la siesta correspondiente viendo el giro de italia , me tomo mi tiempo, para preparacion del material , y es que hace mas de un mes que no salgo a correr solo bike , puff y me planteo un reto duro 22 km, subida al puerto de las golondrinas y bajada puuf ya me estan doliendo las piernas y aun no me he puesto las zapatillas , entre unas cosas y otrass salgo a las 20 horas , y menos mal que mi primo me ahorra los 2 primero km de alfalto , asi que empezamos a trotar por tierra ,( gracias ele )



el primer tramo es el mas duro hasta la llegada a lo alsto de la ``cuesta chica ``, mi traguito de agua y ha seguir trotando ahroa mas fuerte que ya el carril se pone mas llanito pero quedan 6,5 km aun para lelgar al puerto de las golondrinas siempre para arriba ,














pronto empieza ha dejar de darme sol, tu veras que al final se me hace noche , menso mal que he hechado el frontal por si acaso, hombre precavido .......... caida que te ahorras ,

cuando llego al puerto de las minas ya mo hay sol en las montañas y aun quedan 2 km para llegar a las golondrinas , me pienso volver desde ese punto por no llegar muy de noche a cas y preocupar a la familia , pero bueno digo son 4 km mas ida y vuelta desde este punto como mucho son 20 minutos mas , y me digo a por ellos

y asi trotando sin parar llegamos a la meta , bueno digamos que es una meta en mitad del camino por que me quedan 11 km para llegar a casa , me tomo mi barrita de pate de fruta , y me hecho la foto que correspondo y nada , me coloco mi camelbak y vuelta a casa



el sol ya esta puesto son las 21horas, paso por la fuete de la rabita que esta a unos 20 metros del camino , y digo nada me queda medio litor para lso 11 km , sigo adelante, y seguimos trotando, es increible el silencio en la montaña en la horas de anochecer , solo escucho mi paso y el agua moverse en la mochila , increible que paz se respira

cuando se hace de noche me quedan unos 5 km para lelgar a cas , pero ya estamos en zona de cobertura por si pasa algo, y asi llegamso a casa de noche y mi mujer llamandome al movil cuando estaba ha 100 metros del hogar ,




mision cumplida 20 km por el monte con subidas y bajadas muy duras , las piernas machacadas , y una sonrinsa en la cara pro haver dado este estreno al camelbak jejejejej




sábado, 15 de mayo de 2010

HOY HE VUELTO HA SENTIR....








HOY HE VUELTO HA SENTIR LA SOLEDAD EN LA MONTAÑA, EL PASO DE LAS HORAS ENCIMA DE LA BIKE, EL DOLOR EN LAS PIERNAS CON EL ESFUERZO.....

HOY HE VUELTO HA SENTIR TRAS MESES DE PARO OBLIGADO EL SENTIRME BIEN PEDALEANDO, EL ROMPER BARRERAS Y CONSEGUIR METAS QEU HACE MESES QUE NO CONSEGUIA......

HOY HE VUELTO HA SENTIR LO QUE SE SIENTE AL QUEDARTE SIN AGUA, A VER QUE FALTAN KM PARA LA PROXIMA FUENTE , A NOTAR LOS MUSCULOS VACIOS......

HOY HE VUELTO HA SENTIR QUE LA BIKE ES UNA EXTENSION MAS DE MI CUERPO, QUE YA NO ME ASUSTA PENSAR QUE NO LLEGARE DONDE ANTES LLEGABA, QUE SE QUE ME RESPETA TANTO COMO YO HA ELLA , QUE EN LA MONTAÑA SOMOS COMPAÑERPS DE FATIGA.....

HOY HE VUELTO HA SENTIR , EL LLEGAR A CASA VACIO , COM HAMBRE CON SED , CON LAS PIERNAS DOLORIDAS PIDIENDO A GRITOS UN BAÑO,

HOY HE VUELTO HA SENTIR EL POR QUE AMO HA ESTE DEPORTE

miércoles, 12 de mayo de 2010

hoy ha tocado a la 26er titanica de neuvo




hoy ha tocado a la dean colonel de 26er , que la pobre la tengo abandonada desde que llego la 29er , y la pobre se merece salir al monte tambien , ha sido una ruta de dos horitas con sube y baja sin parar , esta tierra es muy muy rompepiernas , que se le va ha ha cer su furto dara tanto sufrir....

martes, 11 de mayo de 2010

lynskey ridgeline 29er


esta bici me esta volviendo loco...........

YO CONOZOC A ESOS LOCOS Y TU??

Yo los conozco. Los he visto muchas veces.

Son raros.

Algunos salen temprano a la mañana y se empeñan en ganarle al sol.

Otros se insolan al mediodía, se cansan a la tarde o intentan que no los atropelle un camión por la noche.

Están locos.

En verano corren, trotan, transpiran, se deshidratan y finalmente se cansan… sólo para disfrutar del descanso.

En invierno se tapan, se abrigan, se quejan, se enfrían, se resfrían y dejan que la lluvia les moje la cara.

Yo los he visto.

Pasan rápido por la avenida, despacio entre los árboles, serpentean caminos de tierra, trepan cuestas empedradas, trotan en el arcén de una carretera perdida, esquivan olas en la playa, cruzan puentes de madera, pisan hojas secas, suben cerros, saltan charcos, atraviesan parques, se molestan con los coches que no frenan, huyen de los perros y corren, corren y corren.

Escuchan música que acompaña el ritmo de sus piernas, escuchan a las gaviotas, escuchan sus latidos y su propia respiración, miran hacia delante, miran sus pies, huelen el viento que pasó por los eucaliptos, la brisa que salió de los naranjos, respiran el aire que llega de los pinos y entreparan cuando pasan frente a los jazmines.

Yo los he visto.

No están bien de la cabeza.

Usan zapatillas de marca, corren descalzos o gastan zapatillas.

Sudan camisetas, calzan gorras y miden una y otra vez su propio tiempo.

Están tratando de ganarle a alguien.

Trotan con el cuerpo flojo, pasan a la del perro blanco, aprietan al pasar por la columna, buscan una fuente para refrescarse… y siguen.

Se inscriben en todas las carreras… pero no ganan ninguna.

Empiezan a correrla en la noche anterior, sueñan que trotan y a la mañana se levantan como niños en Día de Reyes.

Han preparado la ropa que descansa sobre una silla, como lo hacían en su infancia en víspera de vacaciones.

El día antes de la carrera comen pastas y no toman alcohol, pero se premian con descaro y con una comilona apenas termina la competencia.

Nunca pude calcularles la edad pero seguramente tienen entre 15 y 85 años.

Son hombres y mujeres.

No están bien.

Se apuntan en carreras de ocho o diez kilómetros y antes de empezar saben que no podrán ganar aunque falten todos los demás.

Estrenan ansiedad en cada salida y unos minutos antes de la salida necesitan ir al baño.

Ajustan su cronómetro y tratan de ubicar a los cuatro o cinco a los que hay que ganarles.

Son sus referencias de carrera: “Cinco que corren parecido a mí”. Ganarle a uno solo de ellos será suficiente para dormir a la noche con una sonrisa.

Disfrutan cuando pasan a otro corredor… pero lo alientan, le dicen que falta poco y le piden que no afloje.

Preguntan por el puesto de agua y se enfandan porque no aparece.

Están locos, ellos saben que en sus casas tienen el agua que quieran, sin esperar que se la entregue un niño que levanta un vaso cuando pasan.

Se quejan del sol que los mata o de la lluvia que no los deja ver.

Están mal, ellos saben que allí cerca está la sombra de un sauce o el resguardo de un alero.

No las preparan… pero tienen todas las excusas para el momento en que llegan a la meta.

No las preparan…son parte de ellos.

El viento en contra, no corría una gota de aire, el calzado nuevo, el circuito mal medido, los que van caminando adelante y no te dejan pasar, el cumpleaños que fuimos anoche, la llaga en el pie derecho de la costura de la media nueva, la rodilla que me volvió a traicionar, arranqué demasiado rápido, no dieron agua, al llegar iba a apretar pero no quise.

Disfrutan al salir, disfrutan al correr y cuando llegan disfrutan de levantar los brazos porque dicen que lo han conseguido.¡Qué ganaron una vez más! No se dieron cuenta de que apenas si perdieron con un centenar o un millar de personas… pero insisten con que volvieron a ganar.

Son raros. Se inventan una meta en cada carrera.

Se ganan a sí mismos, a los que insisten en mirarlos desde la vereda, a los que los miran por televisión y a los que ni siquiera saben que hay locos que corren.

Les tiemblan las manos cuando se pinchan la ropa al colocarse el dorsal con su numero, simplemente por que no están bien.

Los he visto pasar.

Les duelen las piernas, se acalambran, les cuesta respirar, tienen puntadas en el costado… pero siguen.

A medida que avanzan en la carrera los músculos sufren más y más, la cara se les desfigura, la transpiración corre por sus caras, las puntadas empiezan a repetirse y dos kilómetros antes de la llegada comienzan a preguntarse que están haciendo allí.¿Por qué no ser uno de los cuerdos que aplauden desde la vereda?Están locos.

Yo los conozco bien.

Cuando llegan se abrazan a su mujer o a su esposo que disimulan a puro amor la transpiración en su cara y en su cuerpo.

Los esperan sus hijos y hasta algún nieto o algún abuelo les pega un grito solidario cuando atraviesan la meta.

Llevan un cartel en la frente que se enciende y se apaga y que dice “Llegué -Misión Cumplida”.

Apenas llegan toman agua y se mojan la cabeza, se tiran en la hierba a reponerse pero se paran enseguida porque lo saludan los que llegaron antes.

Se vuelven a tirar y otra vez se paran porque van a saludar a los que llegan después que ellos. Intentan tirar una pared con las dos manos, suben su pierna desde el tobillo, abrazan a otro loco que llega más sudado que ellos.

Los he visto muchas veces.Están mal de la cabeza.

Miran con cariño y sin lástima al que llega diez minutos después, respetan al último y al penúltimo porque dicen que son respetados por el primero y por el segundo.

Disfrutan de los aplausos aunque vengan cerrando la marcha ganándole solamente a la ambulancia o al tipo de la moto.

Se agrupan por equipos y viajan 200 kilómetros para correr 10.

Compran todas las fotos que les sacan y no advierten que son iguales a las de la carrera anterior.

Cuelgan sus medallas en lugares de la casa en que la visita pueda verlas y tengan que preguntar.

Están mal. -Esta es del mes pasado- dicen tratando de usar su tono más humilde. -Esta es la primera que gané- dicen omitiendo informar que esa se la entregaban a todos, incluyendo al que llegaba último y al inspector de tránsito.

Dos días después de la carrera ya están tempranito saltando charcos, subiendo cordones, braceando rítmicamente, saludando ciclistas, golpeando las palmas de las manos de los colegas que se cruzan.

Dicen que pocas personas por estos tiempos son capaces de estar solos -consigo mismo- una hora por día.

Dicen que los pescadores, los nadadores y algunos más.Dicen que la gente no aguanta tanto silencio.

Dicen que ellos lo disfrutan.

Dicen que proyectan y hacen balances, que se arrepienten y se congratulan, se cuestionan, preparan sus días mientras corren y conversan sin miedos con ellos mismos.Dicen que el resto busca excusas para estar siempre acompañado.

Están mal de la cabeza.

Yo los he visto.

Algunos solo caminan… pero un día… cuando nadie los mira, se animan y trotan un poquito.

En unos meses empezarán a transformarse y quedarán tan locos como ellos.Estiran, se miran, giran, respiran, suspiran y se tiran.

Aprietan, frenan y vuelven a apretar.

Me parece que quieren ganarle a la muerte.

Ellos dicen que quieren ganarle a la vida.

Están completamente locos.